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Esculpir tus facciones a través del pelo si es posible y los resultados son espectaculares.
Esta técnica, que permite resaltar rasgos del rostro a través de la aplicación estratégica del maquillaje, se traslado al pelo. El “hair contouring” es una técnica que busca, a través de una mezcla de tonos, acentuar ciertos factores y esculpir tu rostro, además de añadirle movimiento y dimensión a tu melena, haciéndola lucir más abundante y con un efecto 3D. Así como en el maquillaje, los tonos y puntos de luz dependerán de lo que quieras resaltar o minimizar. Si tu cara es más redonda, se recomienda que en la parte frontal se añadan mechones ligeramente más claros, lo que enmarcará e iluminará el área, haciéndola lucir más estilizada. Los tonos claros ayudan a suavizar lo que queremos camuflar y los tonos oscuros, en cambio, lo resaltarán.
Esta técnica busca que se vea todo súper natural y por eso la clave del su éxito es que no existan más de cuatro tonos de diferencia entre el color de la base y el tinte, ya que esto puede provocar que el resultado luzca artificial.
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